Me ha parecido tan vistoso, tan rico y tan sencillo que he decidido de inmediato hacerle unas fotillos improvisadas e incluirlo como mi primera entrada culinaria. Es un pequeño homenaje a mi mami que tanto nos cuida y que a pesar de ser una cocinera a la antigua usanza no deja de sorprenderme con estos pecados improvisados.
En realidad es una forma más coqueta de comer el tradicional postre de fresas con nata. Aprovechad porque la fresa es una fruta riquísima, no solo en sabor, también en beneficiosas propiedades:
Una taza (100 g) de fresas contiene aproximadamente 34,5 calorías y es una excelente fuente de vitamina C y vitamina P o bioflavonoides.
Pues sip, una forma muy vistosa de comer las fresas con nata. Aunque al final siempre como muchas más fresas que nata :P
ResponderEliminarYo voy apurando la nata hasta el final y poder comer más de golpe, rebañandola con el barquillo. Umm, que ico
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